Teclas blancas, teclas negras

Inspirada en el siguiente pensamiento: La vida es como las teclas del piano, las blancas son los momentos felices, las negras los momentos difíciles, pero juntos tocan la mejor melodía: la vida” Cesar de León

Muchas veces sonreímos porque sucedió algo que hizo que se desprenda de nuestro rostro ese gran gesto que es tú sonrisa. Muchas veces te pusiste triste porque sucedió alguna situación que hace que por unos segundos esos labios queden apuntando hacia el suelo y no hacia el cielo.

Pensando bien, a veces la vida se parece a las teclas de un piano, las teclas blancas te roban sonrisas, las teclas negras te traen angustia, pero con el pasar del tiempo nos damos cuenta que las teclas negras también hacen buena música.

De la canción de nuestra vida se van a desprender pocas o muchas notas, todo al final de alguna u otra forma ayuda, solo hay que estar dispuesto a vivir la canción entera y saber que se nos puede presentar una gran cantidad de notas. Cuantas más notas tenga esa canción, más suave y agradable de escucharla será y sobre todo si reflexionamos sobre el sentido en el orden de las mismas.

A veces algunas canciones necesitan “arreglos”, una gran herramienta para el arreglo de nuestra melodía es el perdón.

No dejes de buscar y aprovechar todas las notas que tienes para poder generar día tras día, hasta el último día de tu vida, una bella melodía para tu corazón y los corazones de los demás.

Cuando un gran músico se va de este mundo queda algo hermoso en nosotros que son sus bellas canciones, hasta a veces sucede que de tanto escucharlas por todo lados ya no se sabe ni siquiera de quién es esa canción, pierde autoría, pero atención “lo que pierde en autoría gana en eternidad” (frase extraída de un recital de Facundo Cabral).

Recuerda que queda en ti hacer que tu melodía sea agradable de escuchar por más que no estés presente.

Deseo una bella melodía en tú vida. ¡Fuerzas!

#creciendo #aprendiendo